- Versículo 31:

Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono de gloria

Esto nos señala claramente que quien está sentado en el trono de este mundo, no es Jesús sino Satanás, por eso cada día que pasa vamos viendo más caos y todo lo que la Palabra nos enseña como bueno, en este mundo se va señalando como malo y la persecución a los hijos de Dios va a aumentando a medida que pasa el tiempo. Si bien esto no nos extraña ya que la misma Biblia lo dice (Juan 12:31 o Juan 14:30 y en 2º Corintios 4:3) es necesario abrir nuestros ojos cuando leemos la Palabra para darnos cuenta de qué era lo que Jesús nos quería decir.

- Versículo 40:

Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.

Muchas veces a los cristianos nos critican porque no ayudamos a todas las personas que se nos acercan, e incluso nosotros mismos nos complicamos al pensar que no hemos ido a la cárcel ya que podríamos ser juzgados por eso. Por otro lado hay quienes dejan de lado muchas cosas para tratar de servir en todas las áreas pensando que eso es lo que asegurará la salvación.

Sin embargo al leer el versículo 40 nos damos cuenta que no seremos juzgados por no ayudar a todo el mundo, sino que a los “hermanos de Jesús”, es decir los Hijos de Dios ¿y quienes son estos? Juan 1:12-13 dice claramente:

Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios

Esto queda confirmado cuando leemos Gálatas 6:10

Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe.

No estamos diciendo que es innecesario ayudar a quien no sea cristiano cada vez que tengamos oportunidad de hacerlo, ya que de esta forma tendremos oportunidad de dar testimonio de las bendiciones recibidas. Sino que Jesús dijo que no lo ayudábamos a Él cuando no ayudábamos a alguno de los Hijos de Dios.

Como estos versículos hay muchos ejemplos de cosas que hemos leído muchas veces, sin embargo no hemos entendido el real significado de lo que Jesús nos estaba diciendo, llevando de este modo a muchas personas a confundirse y pensar que pueden alcanzar la bendición haciendo buenas obras.

Que Su Espíritu Santo habite en nuestros corazones y nos ayude a entender la Palabra de Dios cada vez que la estudiemos.